domingo, 23 de junio de 2013

Cuéntame un cuento... X





Aún recuerdo cuando estaba dormida. Cuando sentí ese dulce beso en los labios que me despertó de aquel eterno sueño. Abrí los ojos lentamente, temblando de la emoción, y lo vi a él, a mi príncipe, que venía a rescatarme y a hacerme su mujer.
Bajamos las escaleras emocionados, dejando atrás tantos años de sueños. La luz me deslumbraba, hacía tanto que no la veía. En frente de la torre había un carruaje con hermosos caballos blancos esperándonos. Unos meses después de la boda, tuvimos a nuestra primera hija, Laura.  Todo era perfecto, después de tres años maravillosos de matrimonio teníamos dos hijas y un maravilloso castillo.
Hasta que apareció él. No lo veía desde hacía años, pero ahí estaba, enfrente de mí,  sin pronunciar ni una palabra. Era Raúl, mi mejor amigo de la infancia. Aún recuerdo aquellas risas juntos. Enseguida vino mi marido, y nos presentó. El venía a pintar la habitación de las niñas y a arreglar la fuente de oro. Enseguida pensé:  "Tiene que ser mío". Tras tontear durante varias semanas decidimos escaparnos los dos juntos.
Esos tres meses a su lado, viviendo en la calle, fueron mágicos. Pero echaba de menos a mis niñas. Entonces decidimos escribir una carta:

Querida familia:

Soy mamá. Quería deciros que estoy bien, tan solo me voy a vivir a Australia con Raúl. Cuidar de los caballos y no comer muchos dulces. Es quiero, Mamá.
Enviamos la carta y emprendimos el camino hacia una nueva vida.

CLAUDIA MORGAL, DANIEL REYES, FÁTIMA TORRES

miércoles, 12 de junio de 2013

Índice tema 8. ¡A escena!

Tema 8. ¡A escena!

Este tema recoge contenidos de los temas 11 y 12 del libro de texto.

- Comentario de texto: Romeo y Julieta. Fotocopia y actividades............................

- El género dramático o teatral:
  Características y subgéneros. Esquema (pp. 220 a 224) ........................................

- Puntuación. Fotocopia y actividades......................................................................

- Semántica. Fotocopia y actividades.......................................................................

- Hacemos teatro. Fotocopia del trabajo en grupo (escritura de un texto teatral).
Se incluirá la fotocopia ............................................................................................

Calendario fin de curso


Os recuerdo lo que aún nos queda por hacer, y os adelanto lo que haremos los próximos días:

- Viernes 14:
                       - Examen de recuperación
                       - Examen de lectura para los dos cursos
                       - Entrega de actividades de semántica y puntuación

- Lunes 17: Entrega de textos teatrales. Empezamos a representar

- Martes  18 y miércoles 19: Seguimos representando

- Jueves 20: Hay que traer el cuaderno del tema 8 y todos los cuadernos desde inicio de curso. Bien organizados y presentados

- Viernes 21: Balance del curso. Recapitulamos: ¿Qué hemos hecho? ¿Qué nos ha faltado? ¿Qué cambiaríamos? Nuestros textos

La recuperación de La Guerra de las Galias, debe ser antes del miércoles 19 de junio

- La entrega del libro de texto (Cuadernillos 1, 2 y 3) en perfecto estado se hará entre el lunes  y el miércoles 17 a 19 de junio. Todos los alumnos, aprueben o no, entregarán el libro en esos días. Le será devuelto a aquellos  que suspendan el día de la entrega de notas.

También hay que entregar los libros de la biblioteca que estén pendientes.

- Lunes 24: Visionado y comentario de una película en relación con el tema de la lectura

¡ÁNIMO Y UN ÚLTIMO ESFUERZO! Pronto estaremos de vacaciones.

Actividades de puntuación

Como alguno me pedisteis, os facilito unos enlace donde podéis encontrar las actividades de puntuación que hay que entregar el próximo viernes:

-   El caballero dubitativo

-   El testamento de don Facundo

Cuéntame un cuento ... IX



Diseño de Louboutin para Cenicienta
 
 
La Cenicienta que no quería comer perdices
La cenicienta tenía tantas tantas ganas de ir a la fiesta que finalmente lo consiguió. Pero se puso tan ansiosa que a la mañana siguiente no se acordaba de nada. Pero ahí estaban esos dos señores, con el zapato de cristal de tacón de palmo y de punta esperando para que se lo probara. Al principio no le cabía el pie pero apretó y apretó hasta que le cupo.
 
¡Porque se tuvo que casar con el príncipe! Al príncipe le encantaba las perdices,pero la cenicienta era vegetariana, no comía ni carne, ni pescado, ni llevaba chupa de cuero, aún así tenía que cocinar las perdices porque era la comida preferida del príncipe. "¡Están frías, crudas, malas!" Gritaba el príncipe malhumorado,porque nunca cocinaba las perdices a su gusto. Y lo peor: ¡Tenía que ir subida en los zapatos de cristal!La cenicienta cada vez se encontraba peor.
 
Un día decidió contarlo. ¡Que rollo de príncipe,y de zapatos y de perdices! Ella se fue del palacio.Sólo tenía a su príncipe "amado", la espalda torcida, los pies chafados y el corazón roto.Tuvo suerte de verse, en la perdicería,y le dio por reírse de si misma, de lo inocente que había sido pensando que un príncipe la salvaría. Después de años viviendo con uno, se había dado cuenta de que los príncipes no te salvan... Dejó de sentirse culpable, se perdonó y se dio cuenta que la única capaz de salvarla era ella misma.
 
Ella abrió un restaurante - cabaret vegetariano, que triunfó, donde además de hacer de comer, no paraban de bailar. Y por fin,este cuento acabó con un fin.
 
ISABEL BAUTISTA, ANA GONZÁLEZ, CLAUDIA LAMONEDA, RAFAEL SILVA

Cuéntame un cuento ... VIII


 
El huracán
 
Érase una vez tres hombres llamados  Daniel , Mario  y Peter que se iban a independizar y construir sus propias casas. Daniel que quería ahorrar dinero en la construcción de la casa  compró materiales de poca calidad , Mario que no tenía ganas de ir a comprar los materiales utilizó unos  viejos y  Peter se preocupó y construyó su casa con buenos y nuevos  materiales.
Unos días más tarde después de que se construyeran las casas de los hermanos en la predicción meteorológica decía que un huracán iba a arrasar las zonas por las que pasara.  Primero iría por la ciudad de Daniel, luego por la de Daniel y por último Peter.
Al pasar por la casa de Daniel el huracán la destruyó y tuvo que refugiarse en casa de Mario, pero el huracán al pasar por allí también la destruyó; entonces los dos corrieron a casa de Peter y esta, al estar construida con buenos materiales, resistió y los hermanos sobrevivieron. Esto les enseñó una lección a los dos hermanos, que no para acabar antes o ahorrar dinero hay que hacer mal las cosas.
MARÍA MORGAL, JAVIER QUILES, MARIO SENA, DANIEL SUERO



martes, 11 de junio de 2013

Cuéntame un cuento ... VII


El vikingo y la bestia

Había una vez, un alto y apuesto joven de cortantes navajas de un azul metalizado por ojos, llamado Harek . Este muchacho vivía en un poblado vikingo y era un torpe, afable y cariñoso chaval del que se burlaban por su falta de masa corporal. Además, tenía muchas buenas ideas para inventos innovadores que la gente despreciaba.

Un día, estaba siendo apaleado por los otros chavales, pero el golpe más duro para él fue que su hermano se unió a la refriega. Su padre siempre se avergonzaba de él y elogiaba a su hermano que era el orgullo de la siguiente generación, según todos los vikingos de su poblado incluido el jefe. El joven pensaba que su hermano lo quería a pesar de las diferencias, no podía asimilar lo que ocurría.

Como él se veía muerto, tuvo una idea que fue intentar hacerse con las cuerdas que guardaba en su bolsillo y atarles los pies unos con otros para que, cuando le fueran a dar otra patada ,los unos tiraran de los otros y se cayeran. De este modo Harek correría hasta los establos donde se haría con un caballo con el que iría adonde el destino lo llevara. Se decía que cualquier lugar era mejor que su horrible aldea donde sólo había lugar para un tipo de hombres.

Toda la trama que ideó en tan sólo un minuto, la llevó a la práctica y casi sin darse cuenta ya estaba a lomos de un corcel de guerra, que a pesar de ser más lento que uno normal le valía. Su trayectoria lo dejó en un castillo muy siniestro en el que decidió resguardarse, parecía estar abandonado.

Sin embargo, notaba cierto movimiento en el ambiente que parecía ser de los muebles. Aunque claro, eso serían imaginaciones suyas creadas por el cansancio. Al despertarse, se encontró en una celda con una especie de loba observándolo desde fuera. Ella le dijo: "Tienes tres opciones: la muerte, la desesperación o ser mi amigo". Harek asustado accedió a la última. Pensó que, a lo mejor, siendo amigo de la bestia podría descubrir la historia del extraño castillo y el ser que lo habitaba. Aunque ella era maleducada, impulsiva  y huraña, no tenía otra posibilidad.
 
Así pasaron los meses hasta que ella le comentó:

-Ya te habrás dado cuenta de que los muebles tienen vida propia.

Él sorprendido le respondió:
 
 -Sí, lo cierto es que sí.

La bestia lo agarró del brazo y lo llevó a una habitación del castillo a la que nunca había entrado, pues temía que su propietaria lo descubriese y lo matara.

Ella le contó su historia:
 
Cuando tenía 15 años, hace ya casi 6 años, llegó a este castillo una repugnante señora pidiendo cobijo a cambio de una rosa. Como yo era tan estúpida le cerré la puerta y del mismo modo, me ofreció otra oportunidad que desaproveché nuevamente. Me miró con desprecio y me dijo que era una mala persona y que la belleza estaba en el interior. En ese instante se transformó en una hermosa hechicero y me maldijo a mí, transformándome a semejanza de mi interior, y a mis súbitos en muebles sin ninguna culpa. En ese momento creo que algo en mí despertó y sentí empatía. La hechicera me dio la rosa y me dijo:

- Si antes de los 21 años consigues amar a alguien de puro corazón y que esa persona te corresponda, la rosa ejercerá un poder mágico que anulará la maldición. En caso de que no sea así, esta será la forma con la que pasaréis el resto de vuestras vidas. A la rosa se le van a ir cayendo pétalos conforme crezcas y el día que cumplas 21, el último caerá y su magia ya no funcionará.-Y añadió - Por eso te he traído aquí.

Harek confuso subió a su habitación porque tenía que reflexionar y entender la historia.
 
De nuevo pasó el tiempo, sin saber por qué su corazón palpitaba cuando la veía. Lo cierto era que estaba cambiando, ahora era otra persona, no esa horrible bestia. Pero ese tiempo en sus vidas tan bello duró poco, los vikingos habían seguido su rastro y lo iban a castigar por no portarse como un hombre y huir. Cuando vieron a la bestia intentaron darle caza y ésta, que se había convertido en una buena persona, se dejó sin luchar.

En ese momento, Harek adquirió su valor vikingo y expulsó a los agresores. La bestia le pidió que se acercara a ella que tenía que decirle una cosa muy importante. Ella le confesó que era su cumpleaños y que el pétalo de la rosa estaba por caer. Pero ya no le importaba, pues estaba gravemente herida y había conseguido su objetivo, amar. Ella lo amaba y el muchacho no sabía que decir, solamente qué hacer, la besó. Justo en ese momento el pétalo cayó y al magia no funcionó para ella pero sí para los súbitos. O al menos eso pensaba, pues aunque no se había convertido en humana, ya no estaba herida.

A Harek le daba igual su aspecto, la quería tal como era. Ella era una bestia con mente de humana y él era un vikingo sin corpulencia. De lo que uno carecía es de lo que le sobraba al otro, se complementaban. Así que se casaron a pesar de pertenecer a mundos diferentes y su amor perduró para siempre. De este modo, vivieron felices y comieron perdices .

ANA CASADO, LUCÍA GUIJARRO, PAULA LINARES, JOSÉ CARLOS LÓPEZ 

Cuentame un cuento... VI

 
La verdadera historia de los tres cerditos
 
Érase una vez tres cerditos que vivían en el campo con su madre, pero un día se tuvieron que marchar porque eran ya lo suficientemente mayores para poder vivir por sí mismos. Su madre les recomendó que se hicieran sus propias casas, pero como eran muy flojos,  decidieron irse a vivir a una granja. Encontraron una que les pareció perfecta para ellos y además,  allí pasaban desapercibidos  porque habían muchos cerdos y otros animales de granja.  Allí vivían felices porque no tenían ningún tipo de obligación, así que, podían estar todo el tiempo revolcándose por el barro y gastando bromas pesadas a sus compañeros.
Un día, un pavo que estaba cansado de sus bromas les dijo que pronto llegaría la Navidad  y ellos se pusieron muy contentos porque recordaban las felices fiestas que celebraban con su familia. El pavo se quedó perplejo al verlos y pensó que los tres cerditos no debían ser muy inteligentes.
A los pocos días, apareció por la granja un camión que anunciaba productos de Navidad. En él se veían fotos de cerdos  y de toda clase de embutidos. Del camión se bajó un lobo que se puso a inspeccionar a los cerdos para escoger a los que estaban más gordos. 
El pavo, con la idea de que no se lo llevaran a él para acabar siendo la cena de Navidad de alguna familia, quiso hacerse amigo del  lobo y le dijo que acababan de llegar tres hermosos cerdos de pata negra. A los tres cerditos les dijo que,  como habían sido tan simpáticos con todos los animales, les había tocado la excursión que se hacía en la granja todos los años por estas fechas.
El camión se puso en marcha con los cerditos dentro. Ellos se abrazaban y gritaban muy satisfechos  pensando que habían tenido mucha suerte.
 
LAURA LÓPEZ, JUAN CARLOS MÁRQUEZ, LAURA ROMERO, SERGIO MUÑOZ

Cuéntame un cuento...V

Guitarrista, Juan Soriano (1963)


 El guitarrista de Sevilla

-¿Qué es eso que suena? ¿Qué viene por allí? - Decían los mendigos de la calle Sierpes. Asombrados, todos se pusieron de pie para escuchar la bella melodía de una guitarra bien templada.
No pasó mucho tiempo hasta que sus preguntas se resolvieran. Por la revirá de la calle Sierpes un viejo pero muy apuesto guitarrista iba tocando su guitarra, detrás un grupo de gente desfavorecida le seguía. Los otros mendigos no tardaron mucho en incorporarse a su marcha, al igual que ellos yo, también tarde poco en informarme de lo que pasaba.
Se trataba de que el Señor Alcalde le había dicho que si quitaba a los pedigüeños  de Sevilla para que la ciudad tuviera mayor esplendor, él le daría un trabajo para él o para dárselo a algún amigo.
Al buen hombre no le costaba nada ir tocando su guitarra por toda la ciudad; desde Triana a la Macarena, desde la Cartuja a Santa Cruz, así una a una fue recorriendo las calles más importantes de la ciudad. Yo como no tenía nada que hacer le seguí.
Cada mendigo al verse atrapado por su bella música le seguía. Con este simple paso reunió a más de cien y se los llevó a las afueras de la ciudad, concretamente a Nervión. Allí el buen hombre llamó al Alcalde y le informó de todo, este le dijo que muchas gracias, también le dijo que tenían que pasar dos años hasta que le dieran el trabajo. El guitarrista era viejo pero no tonto, bien sabía que le había mentido.
No tuvo más remedio que llevarse a todas las personas pobres a un bar, allí le invitó a cada uno a una copa. Al hombre se le ocurrió una idea, como tenía mucho dinero y nadie para heredar decidió darle una porción de sus riquezas a cada uno. Los mendigos al escuchar esta noticia empezaron a bailar y cantar, bien sabían que ese buen hombre les había cambiado la vida para siempre. Desde ese momento todas esas personas presentes llevan en un hueco de su corazón al guitarrista de Sevilla.
SARA MUÑOZ, MARÍA ROMERO, CARLOS RUIZ, ANTONIO TELLO

Cuéntame un cuento... IV


 
¡STOP  DESHAUCIOS!
Paseaba por los largos pasillos del centro comercial aquel día de verano , cuando en los estantes del aire acondicionado vi una imagen que me desconcertó, tres hermanos de 20 , 30 y 35 años vestidos de los tres cerditos del cuento vendiendo un juego del mismo. A mí me pareció que habían recreado el cuento a la perfección, y por ello decidí investigar la historia de estos hermanos y en ello descubrí una interesante historia.
Todo se remonta a hace unos muchos de años. Tres hermanos que vivían en  Sevilla,  en Mairena del Aljarafe y todos vivían en la misma calle, la calle Petunia ,  en esa calle había tres casas seguidas que se vendía. Un día que paseaban los tres hermanos por allí de pequeños y dijeron que, cuando fueran mayores, vivirían cada uno en una casa de aquellas que vieron aquel día.
Cuando llego el momento de que Pepe, José y Luis se compraran cada uno una casa, fueron corriendo a esa calle para ver si las casas seguían en venta. Pepe se instaló en la suya, la nº20, José que era el mediano en la nº18 y Luis, el pequeñajo pero ya no tan pequeño, se instaló en la casa nº 16.  Pepe trabajaba en un supermercado de un centro comercial en el que se vende mucho, era muy famoso en la zona. A José le encantaba los parques temáticos, por lo que acabó trabajando en Isla Mágica, el parque de atracciones más conocido en toda Sevilla. Luis todavía buscaba trabajo, pero lo encontró en un puesto de esos que hay de Vodafone en algunos sitios. Todo fue de maravilla durante unos años, todo era perfecto hasta que un día llegaron los famosos recortes y a todos y a cada uno de ellos les bajaron el sueldo. Ellos estaban muy preocupados, no sabían que hacer, sacaban los euros de donde podían, pero ocurrió lo inevitable: Llegó la tan odiada carta en la que se les comunicaba que en el próximo lunes 23 de junio debían abandonar la casa. No sabían que hacer, no tenían a donde ir a sí que, llegado el día, se fueron al centro comercial, pues  al menos allí había aire acondicionado. El vigilante de seguridad llevaba un buen rato vigilándoles ya que llevaban cinco horas allí metidos. Cuando se acercó a ellos lógicamente les pidió una explicación, y contada su historia al vigilante les dio tanta pena que les consiguió el puesto de trabajo.
Y allí están los tres hermanitos vestidos de cerditos, que gracias a aquel vigilante ya no tuvieron que volver a la calle y para agradecérselo le han invitado a su nueva casa, ahora compartida por los tres a leer el cuento de los tres cerditos.
GONZALO ALONSO, IVÁN LÓPEZ, LOLA MULET, MARÍA REY

lunes, 10 de junio de 2013

Cuéntame un cuento...III



Blancanieves y "Los siete enanitos musicales"

En un país muy lejano vivía una bella princesita llamada Blancanieves, que tenía una madrastra, la reina, demasiado cariñosa.
La madrastra preguntaba a su espejo mágico y éste respondía:
- Tú eres, ¡oh,  reina!, la más hermosa de todas las mujeres.
Y fueron pasando los años. Un día la reina preguntó como siempre a su espejo mágico:
- ¿Quién es la más bella?
Pero esta vez el espejo contestó:
- La más bella es Blancanieves.
Entonces la reina, llena de amor quiso tener a Blancanieves consigo para ver si se le pegaba la belleza. Pero esta, cansada de tanto cariño, se escapó de casa.
Blancanieves, al verse sola, sintió miedo y lloró. Llorando y andando pasó la noche, hasta que, al amanecer llegó a un claro en el bosque y descubrió allí una preciosa casita.
Entró sin dudarlo. Los muebles eran pequeñísimos y, sobre la mesa, había siete platitos y siete cubiertos diminutos. Subió a la alcoba, que estaba ocupada por siete camitas. La pobre Blancanieves, agotada tras caminar toda la noche por el bosque, juntó todas las camitas y al momento se quedó dormida.
Por la tarde llegaron los dueños de la casa: siete enanitos que trabajaban en unas minas y se admiraron al descubrir a Blancanieves. Los enanitos, admirados por su belleza, raptaron a Blancanieves para que así ella fuera su criada. La mantuvieron atrapada en su casa durante mucho tiempo, barriendo, preparando la comida...
Mientras tanto, en el palacio, la reina estaba desesperada y le preguntó al espejito dónde estaba Blancanieves
- ¿Espejito, dónde esta mi hermosa hija?
- Tu hija, Blancanieves, ahora vive en el bosque en la casa de los enanitos..
Preocupada por Blancanieves, fue buscarla al bosque. La madrastra llamó al príncipe, que era especialista en psiquiatría, para que actuara como psicólogo a los enanitos.
Blancanieves estaba sola, pues los enanitos estaban trabajando en la mina, estos tenían a Blancanieves encerrada con llave. Cuando llegaron los enanitos de la mina, la madrastra y el “príncipe-psicólogo” llamaron a la puerta, entraron en la casa y el psicólogo habló con los enanitos, estos le dijeron que ellos tenían un sueño, pero si ellos no podían lograrlo, Blancanieves no podía ser libre.
-¿Y cuál es vuestro sueño?-  Preguntó el príncipe.
Feliz, uno de los enanos, contestó:
-Nuestro sueño es cantar, no cantamos mal, deseamos salir de esta casa y del bosque, queremos recorrer el mundo y montar una discográfica que se llame “Los siete hermanitos musicales", el problema es que somos muy pequeños y nadie nos aprecia.
El príncipe organizó un concierto en honor a los siete hermanitos musicales y resultó que al pueblo les gustó. El príncipe les organizó una gira y los siete hermanitos musicales se hicieron famosos. Liberaron a Blancanieves, que vivió con su madrastra y se casó con el príncipe. Tuvieron siete hijos, el mayor heredó el trono del reino, cinco de ellos se dedicaron a hacer los coros de los siete hermanitos musicales y el más pequeño fue el manager de este grupo musical. Desde aquel día los enanitos son muy bien vistos y en la actualidad se celebra una fiesta todos los años en conmemoración a la libertad y a los enanitos.
 
CARMEN HERNÁNDEZ, GUILLERMO MARTÍNEZ, MARÍA TORNERO

Cuentame un cuento...II



Jonny y Vane

Jonny y Vane eran dos hermanos de quince años que vivían en una chabola de las Tres mil viviendas con sus padres. Ellos se pasaban el día en la calle molestando a los vecinos haciendo pintadas... Un día de esos, Jonny y Vane se encontraron una moneda de dos euros en el suelo y decidieron ir al kiosco “Er Simeón” para comprar unos caramelos. Justo al terminar la compra pasaron por un callejón muy chungo donde un hombre encapuchado les cogió por detrás, les tapo la boca con un esparadrapo haciéndoles caminar durante un largo tiempo. Pero ellos, aunque no iban al instituto, eran muy listos y cada cierto tiempo soltaban un caramelo sin que el hombre encapuchado se diera cuenta, para mas tarde si lograban escapar, poder volver.

Después de una hora más o menos de viaje a pie les destaparon los ojos y vieron una enorme casa hecha únicamente de aparatos electrónicos como: televisores, ordenadores, Ipods, consolas... Entonces entraron en la casa y los encerraron en un cuarto donde no había nada, ni un simple colchón para dormir.

Pasaban las horas y los hermanos cada vez tenían más hambre, entonces el hombre encapuchado entró en el cuarto quitándose la capucha, les dijo que bajaran a comer, y los niños bajaron disparados hacia la cocina. Para almorzar había lentejas, aunque a ellos no les encantaban las lentejas se las comieron todas del hambre que tenían. Al terminar de comer el hombre les puso a trabajar, al niño quitando las malas hierbas del patio y a la niña limpiando toda la casa. Al acabar el día los hermanos estaban muy cansados, así que cuando terminaron de cenar cayeron derrumbados en el suelo de su cuarto.

Al día siguiente pensaron un plan para escapar, que consistía en que Vane, cuando estuviera limpiando, simularía que se torcía un tobillo, entonces el hombre se acercaría a ella para ayudarla, en ese momento Jonny sigilosamente le atizaría con el portátil que había sobre la mesa, con esto lo dejarían inconsciente para después saltar por encima de la pared del patio. A la mañana siguiente se despertaron, desayunaron y se pusieron a realizar su trabajo. Tras quince minutos limpiando, la niña comenzó el plan haciéndole a su hermano un gesto para que se preparara para atizar rápidamente al hombre. Luego se tiró al suelo y empezó a chillar como una loca, el hombre llegó rápidamente tal como habían planeado. El niño cogió el portátil, le dio una buena castaña al hombre que se desplomó en el suelo y salieron corriendo, pero Vane resbaló con una pastilla de jabón cuando el hombre le cogió una pierna, sin embargo Jonny actuó rápido cogiendo un hacha que el mismo había dejado a propósito debajo de la mesa tras las tareas del día anterior y le cortó el brazo al hombre. 
Los niños treparon por una pared del patio aunque no sin antes coger todos los aparatos electrónicos que pudieron. Dejaron al hombre retorciéndose de dolor y desangrándose. Entonces los hermanos vieron que no estaban los caramelos que soltaron para volver, supusieron que se lo habrían comido los animales. Caminaron sin rumbo durante un largo tiempo, cuando encontraron una cueva llena de dinero, Jonny tapó la entrada de la cueva con muchas piedras y depositó los aparatos que llevaban cargando durante horas en su interior junto a las montañas de dinero. Así que caminaron hacia su casa. Extrañamente llegaron a su casa, sus padres les riñeron mucho por haber desaparecido, pero los niños le explicaron lo sucedido y le dieron esa buenísima noticias. Los condujeron hasta la cueva, pero por culpa de las ondas magnéticas que emitían aquellos aparatos un oso pardo molesto por el ruido encontró la cueva y se los comió a todos.

ANDREA BONILLA, FRANCISCO MUÑOZ, ANDREA RODRÍGUEZ, NICOLÁS SÁEZ

Cuéntame un cuento ... I

Fábulas, cuentos, mitos, leyendas... Los relatos nos ha llevado muchos días de lectura. Ahora os tocaba escribir. Y hemos visto que los cuentos infantiles dan mucho de sí, y que sus personajes no siempre son lo que parecen.

Ilustración de Caperucita en Manhattan

Caperucita in the City

Hola, me llamo Caperucita Azul,  y soy la hermana gemela de Caperucita Roja, a la que odio. Siempre se lleva el protagonismo solo porque tiene un cuento propio donde se libra de un lobo, supuestamente. Mi hermana vive en un bosque con mi madre; en cambio yo vivo en la ciudad con mi padre, ya que están divorciados. Ahora estoy aquí aburrida en la cárcel.
Esta es la historia de como acabé en la cárcel:
Estaba yo en mi habitación tan tranquila durmiendo, cuando entró mi padre y empezó a molestarme.
- Caperu, Caperu, despierta. ¿Puedes ir a buscar a tu abuelo que se ha  perdido en la maratón? Seguramente está vagando por las calles intentando encontrar la meta, porque al ritmo que va,  habrá perdido de vista a todos los corredores que tendría delante- me dijo.
-¡Otra vez!, pero si todos los meses pasa lo mismo, ¿y porqué no vas tú?- respondí.
-Porque....tengo que hacer la comida - contestó.
-Esta vez iré, ¡pero esta es la última vez que voy!- repliqué.
-Que no me entere yo que vuelves a coger el coche,  que la última vez la armaste buena y te confisqué el carné - me advirtió.
-Vale, vale - murmuré.- Tu tranquilo, que ya me encargaré de cogerlo.
Pero a mi me daba igual lo que me dijese, así que cogí las llaves de debajo de su almohada y fui a por mi abuelo.
Fui tonta porque me salté el stop más importante y peligroso de la ciudad; donde todos los policías se reúnen a charlar y comer donuts. Y me vi involucrada en una persecución de la que no pude salir. Por esta razón estoy en la cárcel, como ya os conté antes. 
***** 
Creo que estoy oyendo una voz familiar en la celda de al lado; voy a ver quién es.
- ¿Abuelo?, ¿qué haces aquí?
- Nada, que me dio un ataque al corazón por el esfuerzo que requería el maratón. Las pastillas estaban muy caras, así que las tomé prestadas porque era una urgencia, y creía que lo entenderían. Por cierto Caperu, ¿qué has hecho esta vez?
- Pues...... me salté el stop de la calle Calipso.
- ¡NIÑA!. ¿Tú estás bien de la cabeza? ¡Normal que estés aquí!.
- Tranquilízate, que ya vendrán a por nosotros. Un momento, vendrán a por nosotros. ¡Oh, oh! ¡Papá se va ha enterar!
Después de toda esta movida me está entrando el cansancio, así que me voy a echar una siesta. Me voy a tumbar en el viejo colchón de la esquina y me estoy quedado dormida...
- Pero, ¿qué veo?, ¿qué oigo?, ¿de quién es esa caperuza roja?... ¡Ah! ¡Esa es mi hermana!
Al ver a mi hermana, me asusto y abro los ojos. Sólo tardo un segundo en darme cuenta de que estoy en mi cama, a punto de caerme de ella.
-Caperu, Caperu, despierta. ¿Puedes ir a buscar a tu abuelo que se ha  perdido en el maratón?. Seguramente está vagando por las calles intentando encontrar la meta, porque al ritmo que va,  habrá perdido de vista a todos los corredores que tendría delante.
Creo que esto ya ha pasado antes, todo ha sido tan extraño... Pero de una cosa estoy segura, el coche no lo vuelvo a coger en la vida.
CLAUDIA ACOSTA, ZORAIDA BANDA, IRENE BAUTISTA, PAULINA LONDOÑO